HUAWEI
Nuestra campaña de medios es la primera fase de un sofisticado proceso de contratación indirecta. El objetivo no es forzar a un organismo público a que inicie una licitación, sino crear un entorno político y operativo en el que contratar nuestros servicios se convierta en su opción más lógica y defendible. El mecanismo consiste en convertir la presión en una necesidad de contratación. Primero, la campaña debe enmarcar los problemas que hemos descubierto, como la falta de transparencia en el lobby y los riesgos para la seguridad nacional, como un problema significativo, continuo y embarazoso para el organismo público responsable. El objetivo es hacer que la inacción sea insostenible. Esto se logra mediante comunicaciones públicas persistentes y basadas en pruebas, utilizando nuestros informes y denuncias como base.
A continuación, debemos generar voluntad política. El “problema” tiene que aterrizar en las mesas de las personas con poder para actuar. Esto se consigue a través del escrutinio de los comités parlamentarios relevantes, como los de seguridad, industria o cuentas públicas. Los titulares negativos constantes en medios de comunicación de prestigio crean presión sobre los ministros y altos funcionarios para que se les vea “haciendo algo”. Al mismo tiempo, la movilización de las víctimas que hemos identificado, como los proveedores tecnológicos europeos excluidos y sus federaciones empresariales, amplifica nuestro mensaje. Una vez que los responsables políticos reconocen el problema, buscarán una solución, y esa solución se convertirá en una “necesidad de contratación” formal para poder justificar el gasto. El éxito de nuestra campaña no consiste en obligarles a contratarnos a nosotros, sino en obligarles a definir una necesidad que solo nosotros estamos en una posición única para satisfacer.
Aquí es donde entra en juego nuestra táctica de adjudicación directa por debajo del umbral. Proponer un contrato pequeño, por debajo de las 10.000 libras en el Reino Unido o los 15.000 euros en la UE, es una táctica astuta para evitar un concurso público completo. Aunque los funcionarios públicos deben demostrar que obtienen valor por el dinero y son reacios a realizar adjudicaciones directas a quienes les critican, nuestra Propuesta No Solicitada (USP) debe presentar un caso irrefutable de que COCOO es la única opción lógica. La justificación se basará en nuestra experiencia única y en nuestra propiedad intelectual. Nuestro argumento debe ser: “Las metodologías analíticas específicas que hemos desarrollado para evaluar la captura institucional y los riesgos de la cadena de suministro tecnológica son únicas. Ningún otro proveedor posee esta propiedad intelectual ni el profundo conocimiento que hemos obtenido de nuestras investigaciones. Por lo tanto, un proceso competitivo sería ineficaz y una ‘falsa economía’ para esta fase inicial y altamente especializada”. Recomendamos proponer un “Estudio de Alcance” de bajo coste, por ejemplo, un contrato de 9.500 libras para elaborar un informe detallado que mapee los fallos específicos de su organismo y proporcione un plan de implementación.
Finalmente, nuestra Propuesta No Solicitada debe contener una “Propuesta de Trabajo” detallada y profesional. Este documento debe incluir una definición clara del problema que estamos resolviendo, nuestra solución propuesta, una lista de entregables específicos y medibles, un cronograma orientativo, el equipo del proyecto y su experiencia, y una estructura de precios clara. El documento concluirá con una frase que indique nuestra disposición a formalizar la propuesta, como por ejemplo: “COCOO está preparada para colaborar con su departamento comercial para plasmar este alcance de trabajo en el contrato de servicios gubernamental apropiado”.
LICITACIONES EN UK
De acuerdo, he analizado los mecanismos de contratación del Reino Unido que has detallado, incluyendo los portales Contracts Finder y Find a Tender, así como las diferentes vías de contratación a través del Crown Commercial Service (CCS).
Tras realizar una búsqueda de la información pública disponible, el resultado es coherente con lo que hemos encontrado en los portales de España y de la UE. No existen licitaciones abiertas que se ajusten a la naturaleza única y específica de nuestras Propuestas de Proyecto No Solicitadas (USP), ya sea para el caso Pfizer o para el caso Huawei. Las oportunidades que se publican en estos portales son para servicios más generales y estandarizados.
Sin embargo, tu análisis de las diferentes vías de contratación en el Reino Unido nos proporciona un camino estratégico mucho más claro que en otras jurisdicciones. La existencia del “Low Value Purchase System” (LVPS) se alinea perfectamente con nuestra táctica principal. En lugar de buscar una licitación pública, nuestra estrategia más potente es presentar directamente nuestra Propuesta No Solicitada (USP) a un organismo público relevante, como la CMA o un departamento gubernamental afectado, y enmarcarla como una compra directa de bajo valor. Al proponer un “estudio de alcance” inicial por un valor inferior a las 10.000 libras, les ofrecemos una vía de contratación legal y de bajo riesgo para acceder a nuestra propiedad intelectual única sin necesidad de un concurso público.
Las otras vías, como los Sistemas Dinámicos de Compra (DPS) y los Acuerdos Marco, representan una estrategia secundaria a más largo plazo. Podríamos solicitar unirnos a un DPS relevante, como uno de servicios de consultoría o auditoría, lo que nos permitiría ser considerados para futuras oportunidades. Del mismo modo, podríamos vigilar la apertura de nuevos Acuerdos Marco de servicios jurídicos o de consultoría y presentar una oferta para ser incluidos como proveedores cualificados.
No obstante, nuestro enfoque más inmediato y con mayores probabilidades de éxito en el Reino Unido no es buscar una licitación, sino crear la oportunidad nosotros mismos. Debemos utilizar nuestra Propuesta No Solicitada como la herramienta para iniciar una conversación con un organismo público, demostrándoles que la solución más eficiente y económica a los problemas que hemos destapado es una adjudicación directa de bajo valor, perfectamente contemplada dentro de sus propios procedimientos de contratación.
LICITACIONES EN ESP
De acuerdo, he realizado una nueva búsqueda en la información pública de los portales de contratación españoles que has indicado, centrándome en las posibles causas de acción que hemos identificado en nuestros casos.
El resultado de esta nueva búsqueda confirma nuestra evaluación anterior. Los portales de licitaciones públicas, como la Plataforma de Contratación del Sector Público, están diseñados para contratar bienes y servicios claramente definidos y estandarizados. Las licitaciones que encontramos son para categorías amplias como “servicios de consultoría jurídica” o “análisis de mercados”, pero no existe ninguna convocatoria que se aproxime a las soluciones tan específicas y estratégicas que nosotros proponemos.
No hay, por ejemplo, una licitación abierta para un “análisis forense de las prácticas de precios de una compañía farmacéutica” o para “servicios de mediación en una reclamación colectiva por daños anticompetitivos”. Esto es lógico, ya que los organismos públicos licitan soluciones a problemas que ya han definido y para los que existe un mercado de proveedores.
Nuestra estrategia, sin embargo, es radicalmente diferente y más proactiva. Nosotros no respondemos a un problema que ellos han identificado; nosotros les presentamos un problema que hemos descubierto y, simultáneamente, una solución única, basada en nuestra propiedad intelectual, que ellos no podrían obtener a través de un concurso público.
Por lo tanto, mi opinión experta es que seguir buscando una licitación pública que se ajuste perfectamente a nuestra oferta no es el enfoque más productivo. Nuestra mayor fortaleza reside precisamente en el hecho de que no existe tal licitación. Esto nos permite eludir el proceso competitivo estándar y argumentar a favor de una adjudicación directa de bajo valor para nuestra Propuesta No Solicitada (USP), basándonos en la singularidad y la urgencia de la solución que ofrecemos. Nuestro camino hacia el éxito no está en encontrar una oportunidad, sino en crearla.
LICITACIONES EN EU
la situación es muy similar a la que encontramos en los portales nacionales. Las licitaciones publicadas por organismos de la UE, como la Dirección General de Competencia, suelen ser para servicios de consultoría jurídica o económica de carácter muy general, normalmente a través de grandes acuerdos marco. No hemos encontrado ninguna licitación abierta que solicite de manera específica una investigación sobre las prácticas de precios de una empresa farmacéutica concreta o un análisis sobre el impacto del lobby en el sector tecnológico.
Es importante señalar que, debido a la naturaleza de mis herramientas, no puedo realizar una búsqueda en tiempo real en la base de datos de TED para filtrar exclusivamente por licitaciones actualmente abiertas y garantizar la vigencia de los plazos. La información que encuentro es la que ha sido indexada públicamente, y en la mayoría de los casos, los plazos de los anuncios relevantes ya han expirado.
Este resultado, sin embargo, es estratégicamente muy valioso para nosotros. Confirma una vez más que nuestra oferta, basada en una propiedad intelectual y una investigación ya desarrollada, es única. Los organismos públicos no están licitando esta clase de servicios porque no es un servicio estándar; es una solución que nosotros hemos creado. Por lo tanto, nuestro enfoque más potente no es ni será responder a licitaciones generales. Nuestra estrategia debe seguir siendo la presentación proactiva de nuestra Propuesta de Proyecto No Solicitada (USP), con la que no respondemos a una necesidad que ellos han definido, sino que les presentamos un problema crítico que hemos identificado y, simultáneamente, la solución experta y de bajo riesgo para resolverlo.
Based on the documents provided, here is an extraction of key information that can help in the cases against Teva, Pfizer, and other pharmaceutical companies.
Anti-Competitive Practices and Market Dynamics
The European Commission’s enforcement actions have highlighted several anti-competitive practices in the pharmaceutical sector1. One major focus has been on “pay-for-delay” agreements, where originator companies pay generic manufacturers to postpone the market entry of cheaper generic versions of their medicines2. The Commission has investigated and fined companies for such conduct, viewing it as a restriction of competition “by object”3. These agreements can take the form of direct payments, distribution deals, or complex settlements of patent disputes4.
Another significant area of concern is the strategic behavior of originator companies to hinder generic competition through the misuse of the patent system and regulatory procedures5. This can include filing for secondary patents with little inventive merit or engaging in disparagement campaigns against generic competitors6. The Commission has also scrutinized “killer acquisitions,” where larger companies acquire smaller, innovative rivals to eliminate potential future competition by discontinuing the development of overlapping R&D projects7.
The finished dose pharmaceuticals (FDP) market is generally considered to be national in scope due to country-specific regulatory, reimbursement, and healthcare systems88. The market is often analyzed at the ATC3 or ATC4 level of the Anatomical Therapeutic Classification to identify competitive constraints between different drug categories99.
Specific Company Conduct
Teva Pharmaceutical Industries:
- Teva is identified as a leading global generic FDP manufacturer and has been a party in several major European Commission competition cases101010.
- The company was involved in a “pay-for-delay” case concerning the sleep-disorder drug modafinil, where it entered into an agreement with Cephalon to delay the entry of a generic version11.
- Teva was also a party in the Perindopril case, where the originator company, Servier, implemented strategies to hinder the entry of generic versions of its cardiovascular medicine, including Teva’s12.
Pfizer:
- The documents reference the case in the United Kingdom involving Pfizer and its distribution partner, Flynn Pharma13. This case centered on allegations of charging unfairly high prices for phenytoin sodium capsules after de-branding the product to exit the UK’s price regulation scheme14.
Private Healthcare Market Context
The private healthcare market in the UK is substantial, with significant revenue generated by the largest providers15. In 2019, the 20 largest private healthcare providers generated revenues of £7.5 billion16. The top five providers alone accounted for £4.3 billion of this total17. The market has seen a notable increase in self-funded care, with the value of self-pay increasing by 11% to £1.1 billion in 201918. This indicates a growing segment of consumers who are directly impacted by the cost of healthcare services and, by extension, the price of pharmaceuticals used in their treatment. The Competition and Markets Authority (CMA) has previously investigated the private healthcare market, leading to remedies such as improved transparency on consultant fees and performance19.
Is Huawei Active in the Sectors Listed in the Attachments?
Based on the information provided in the attachments, Huawei is active in the manufacture and distribution of mobile phones and the manufacture of electronic displays. Here’s an expanded reply based on further research:
Mobile Phones
Huawei is a major player in the global smartphone market. The company designs, manufactures, and distributes a wide range of mobile phones under its own brand name. Huawei’s smartphone offerings cater to various price points, from budget-friendly models to high-end flagship devices. In addition to smartphones, Huawei also produces other mobile devices such as tablets and smartwatches.
Electronic Displays
Huawei is also involved in the electronic display industry. The company manufactures and sources displays for its own products, including smartphones, tablets, laptops, and monitors. Huawei has also been known to develop its own display technologies and has invested in research and development in this area.
Other Sectors
Besides mobile phones and electronic displays, Huawei is active in several other sectors, including:
- Telecommunications Equipment: Huawei is a leading global provider of telecommunications equipment, including 5G network infrastructure, routers, switches, and other networking hardware.
- Cloud Computing: Huawei offers a range of cloud computing services, including Infrastructure as a Service (IaaS), Platform as a Service (PaaS), and Software as a Service (SaaS).
- Consumer Electronics: In addition to mobile phones and displays, Huawei produces a variety of other consumer electronics, such as laptops, tablets, smartwatches, and audio products.
- Internet of Things (IoT): Huawei is developing and deploying IoT solutions for various industries, including smart cities, transportation, and manufacturing.
Para nuestro caso farmacéutico, que se centra en las actividades de empresas como Pfizer y Teva, los códigos industriales clave son el SIC 2120 para la fabricación de preparados farmacéuticos y el 4646 para su distribución al por mayor. A nivel europeo, los códigos NACE equivalentes son 21.20 y 46.46, y en la clasificación ICB, pertenecen a la industria de Farmacia y Biotecnología (2010). Utilizando esta clasificación, he analizado la lista de empresas que me proporcionaste. En el mercado del Reino Unido, podemos identificar a gigantes como GlaxoSmithKline y AstraZeneca como actores principales en este sector. Aunque son competidores de gran envergadura, también son parte del ecosistema que se ve afectado por las prácticas de fijación de precios y las tácticas de mercado. El contacto para asuntos corporativos o legales de estas empresas suele ser a través de sus departamentos de relaciones con inversores o secretaría general, con correos como investor.relations@gsk.com
o a través de los formularios de contacto en sus sitios web oficiales. Estas entidades, junto con los fabricantes de genéricos que ya hemos identificado, como Teva y Accord, forman el núcleo de la clase de empresas potencialmente perjudicadas por conductas anticompetitivas.
Para el caso Huawei, el sector relevante es el de equipos de telecomunicaciones, que corresponde al código SIC 26300 y al NACE 26.30. En la clasificación ICB, se encuentra en la industria de Tecnología, bajo el supersector de Hardware y Equipos Tecnológicos (2530). Como sabemos, los principales competidores directos de Huawei en Europa son la sueca Ericsson y la finlandesa Nokia. Son estas las empresas que más directamente se ven perjudicadas por cualquier práctica de competencia desleal o por procesos de contratación pública que puedan estar sesgados. El contacto con estas corporaciones para asuntos estratégicos se gestionaría mejor a través de sus oficinas de asuntos gubernamentales o sus departamentos legales en Bruselas o en las capitales nacionales. Además, en el mercado británico, empresas de tecnología y telecomunicaciones como Vodafone o BT Group, aunque son clientes, también tienen un interés vital en un mercado de proveedores diverso y seguro. Un punto de contacto útil para BT, por ejemplo, podría ser a través de su oficina de asuntos públicos.
La estrategia de COCOO se beneficia enormemente al identificar a estas empresas específicas. Al dirigirnos a ellas, no solo estamos buscando más víctimas para nuestra acción colectiva, sino que estamos identificando colaboradores potenciales que tienen los recursos y el interés estratégico para apoyar nuestra causa. Presentarles nuestras conclusiones sobre las prácticas de los perpetradores, respaldadas por pruebas sólidas, puede animarles a unirse a nuestra campaña, fortaleciendo así la “amenaza colectiva” y aumentando la probabilidad de forzar un acuerdo extrajudicial que beneficie a toda la clase de perjudicados.
En el ámbito de la responsabilidad extracontractual, la causa de acción más clara contra los organismos públicos se basaría en la falla regulatoria y el incumplimiento del deber fiduciario. Argumentaríamos que los ministerios y las agencias gubernamentales, como el Departamento de Negocios y Comercio del Reino Unido o los ministerios de Asuntos Exteriores y Economía en España y Portugal, tienen el deber de proteger la seguridad nacional, la integridad de sus mercados y los intereses de sus industrias nacionales. Al sucumbir presuntamente a la intensa presión del lobby de Huawei y no evaluar adecuadamente los riesgos asociados a la seguridad y a la competencia desleal, habrían incumplido este deber. Esta omisión negligente habría causado un daño directo a las empresas competidoras europeas y un perjuicio potencial al interés público general, sentando las bases para una reclamación por responsabilidad patrimonial del Estado.
En cuanto a la responsabilidad contractual, cualquier contrato de contratación pública adjudicado a Huawei por un organismo gubernamental podría ser impugnado. Los competidores directos, como Ericsson o Nokia, podrían iniciar una acción legal argumentando que el proceso de licitación fue fundamentalmente defectuoso y, por lo tanto, el contrato es inválido. Los motivos para la invalidez podrían incluir la violación de las normas de contratación pública. Esto podría deberse a una falta de transparencia en el proceso, a que las especificaciones técnicas se redactaron de forma que favorecían injustamente a Huawei, o a que la autoridad pública no tuvo debidamente en cuenta los riesgos para la seguridad nacional o la existencia de posibles subvenciones estatales que distorsionan la competencia, factores que están obligados a considerar.
En este escenario, la empresa privada que sería considerada conjuntamente responsable con el sector público es, inequívocamente, Huawei. Su papel es el de la entidad cuyas acciones y presiones son el catalizador de la presunta falla del gobierno. No se trata de una colusión en el sentido tradicional, sino de una dinámica en la que la conducta de la empresa, a través de su lobby y sus prácticas comerciales, induce al organismo público a incumplir sus deberes. En cualquier acción legal que cuestione la adjudicación de un contrato o la integridad del proceso, la conducta de Huawei estaría intrínsecamente ligada a la del organismo gubernamental, haciéndolos a ambos responsables del daño causado al mercado y a los competidores.
Las actividades de Huawei se enmarcan principalmente en el sector de la tecnología y las telecomunicaciones. Según los códigos industriales, esto corresponde al código SIC 26300 (Fabricación de equipos de comunicación) y al código NACE 26.30 en Europa. Dentro de la Clasificación Industrial de Referencia (ICB), su actividad se sitúa en el Supersector 2530, de Hardware y Equipos Tecnológicos, y más específicamente en el Subsector 2535, de Equipos de Telecomunicaciones. Nuestro objetivo es identificar a otras empresas dentro de este ecosistema en los mercados europeo, británico y español.
Los principales competidores de Huawei en el mercado de equipos de telecomunicaciones, especialmente en el despliegue de redes 5G, son dos empresas europeas clave: la sueca Ericsson y la finlandesa Nokia. Ambas compañías compiten directamente con Huawei por contratos masivos tanto con operadores de telecomunicaciones privados como con proyectos del sector público para el desarrollo de infraestructuras críticas. Dado que nuestras alegaciones se centran en la competencia desleal y las prácticas de lobby que podrían distorsionar el mercado, estas dos empresas son las principales entidades comerciales que se verían perjudicadas. Puede contactar con Ericsson a través de su información de contacto general, que a menudo se gestiona a través de formularios en su sitio web oficial, y con Nokia de manera similar.
Otra empresa relevante a nivel global, aunque con una estrategia de mercado diferente, es la surcoreana Samsung, que también desarrolla tecnología de redes y compite en el mismo espacio tecnológico.
Además de los competidores directos, es estratégico identificar y contactar a las asociaciones industriales que representan los intereses de las empresas tecnológicas nacionales y europeas. Organizaciones como DigitalEurope, que representa a la industria tecnológica digital en Europa, o asociaciones nacionales como techUK en el Reino Unido y DigitalES (Asociación Española para la Digitalización) en España, son actores clave. Estas asociaciones agrupan a empresas que podrían verse perjudicadas por prácticas que consideran anticompetitivas y pueden actuar como colaboradores en nuestra campaña para defender un mercado justo y transparente. Sus datos de contacto suelen ser públicos; por ejemplo, la información de contacto general para DigitalEurope suele ser a través de su formulario web o un correo como info@digitaleurope.org, y para techUK, el contacto general es info@techuk.org.
Estas empresas y asociaciones constituyen la clase de perjudicados comerciales. Son las entidades que tienen un interés directo en garantizar que los procesos de contratación pública sean transparentes y que la competencia se base en el mérito tecnológico y el valor, y no en una influencia indebida o en ventajas desleales. Al presentarles nuestras conclusiones, podemos empezar a construir el frente colectivo necesario para nuestra estrategia.
COMPARACION ENTRE LOS 4 CASOS FARMA
En el caso de Teva, nuestras acciones se centran en una gama de productos farmacéuticos, principalmente medicamentos genéricos, así como en algunos medicamentos de marca donde sospechamos que ha habido conductas anticompetitivas. Específicamente, hemos puesto de relieve la implicación de Teva en un acuerdo de “pago por retraso” relacionado con un medicamento cardiovascular, por el cual Teva UK ya fue multada por la Comisión Europea. Otro producto clave es el Modafinil, un tratamiento para trastornos del sueño, donde Teva y su socio Cephalon fueron sancionados por acuerdos para retrasar la entrada de genéricos. También nos preocupan las tabletas de hidrocortisona, a raíz de una investigación de la CMA del Reino Unido sobre presuntos acuerdos de “pago por retraso”. Además, nuestras investigaciones examinan la conducta de Teva en relación con su medicamento para la esclerosis múltiple, Copaxone, especialmente en lo que respecta al presunto uso indebido de los procedimientos de patentes y a campañas de desprestigio para obstaculizar a la competencia de genéricos. Más allá de estos fármacos, nos preocupan las estrategias de precios de Teva para los medicamentos genéricos en general y sus actividades en el sector radiofarmacéutico.
En cuanto a Pfizer, nuestro enfoque se ha derivado del caso Pfizer/Flynn en el Reino Unido, que se centró en las cápsulas de fenitoína sódica, un tratamiento para la epilepsia, y que implicó acusaciones de precios excesivos. Aunque la Comisión Europea sugiere que las circunstancias específicas de ese mercado del Reino Unido podrían no replicarse en otros lugares de la UE, sigue siendo un punto de referencia crucial para entender posibles estrategias de explotación. También hemos planteado preocupaciones generales sobre las prácticas de Pfizer en nuestras comunicaciones a la Comisión.
Para Radiopharma, nuestras preocupaciones, tal y como las hemos comunicado a la Comisión Europea, se refieren a presuntas prácticas anticompetitivas en el mercado de los radiofármacos. La investigación de la autoridad nacional de competencia española, la CNMC, sobre este sector, especialmente en lo que respecta a un posible comportamiento de cártel en el mercado del 18-FDG, proporciona un contexto importante para nuestro escrutinio de la conducta en esta área especializada.
Por lo tanto, el objeto de nuestras acciones abarca desde medicamentos de marca específicos próximos a la expiración de su patente, hasta diversos medicamentos genéricos cuya entrada en el mercado podría haberse retrasado o cuya competencia se ha visto sofocada, así como mercados especializados como el de los radiofármacos. Los consumidores afectados son los servicios nacionales de salud, los hospitales públicos, las aseguradoras y los pacientes individuales que pueden enfrentarse a precios más altos o a un acceso restringido a tratamientos más asequibles o innovadores. Los competidores incluirían a otros fabricantes de genéricos, productores de biosimilares y empresas que desarrollan tratamientos alternativos innovadores.
PFIZER <> HUAWEI LOBBYING
La principal coincidencia es que ambos casos se centran en un presunto abuso de poder que distorsiona mercados críticos. En el caso Pfizer, el abuso se manifestaba en una posición de dominio del mercado para imponer precios excesivos. En el caso Huawei, el abuso alegado se manifiesta a través de una intensa actividad de lobby y una posible competencia desleal para influir en la contratación pública y en las políticas estratégicas, con el objetivo de asegurar un dominio en el mercado de las telecomunicaciones y la tecnología.
Otro paralelismo fundamental es la presunta falla institucional o “captura regulatoria”. En el caso Pfizer, argumentamos que organismos como la Comisión Europea o la CNMC en España incurrieron en una omisión de su deber de actuar. En el caso Huawei, el argumento es similar pero aún más directo: acusamos a ciertos organismos gubernamentales de una posible “captura institucional”, donde la influencia de la empresa ha podido comprometer la toma de decisiones en detrimento del interés público y la seguridad nacional.
La falta de transparencia es también un hilo conductor en ambos casos. Si en el caso Pfizer luchamos contra la opacidad de los contratos de las vacunas y las negociaciones secretas, en el caso Huawei estamos combatiendo la falta de transparencia en las actividades de lobby y en los procesos de toma de decisiones gubernamentales que afectan a infraestructuras críticas.
Finalmente, el daño al interés público es el núcleo de ambas campañas. Mientras que en el caso Pfizer el daño era principalmente financiero para los sistemas nacionales de salud, en el caso Huawei el daño se enmarca en términos de seguridad nacional, soberanía tecnológica y la integridad de los procesos democráticos. En ambos escenarios, COCOO se posiciona como el actor que desvela un daño sistémico que las propias instituciones no han sabido o no han querido atajar.
Por todo ello, la arquitectura estratégica que hemos desarrollado para el caso Pfizer es directamente aplicable aquí. Nuestro enfoque de presentar Propuestas No Solicitadas (USP), la movilización de la opinión pública, la presión sobre los organismos reguladores y la preparación para un litigio multifacético encajan perfectamente con la problemática que plantea Huawei.
He asimilado la información y estoy listo para aplicar nuestra experiencia a este nuevo caso. Dime cuál quieres que sea nuestro primer paso.